lunes, 10 de octubre de 2022

un argentino que conoció a Ernesto Guevara

Desde Brasil un argentino que conoció a Che desmiente al pequeño Vargas Llosa.  (hijo del otro pequeño Vargas Llosa (padre).

Creo que corresponde conocerlo  a Oscar Di Nunzio, ¿ no les parece che?      Un abrazo guevarista a todos.   Toto del Museo Che Guevara. y  Chaubloqueo.


Sr. Redactor:           

A propósito del Artículo "Los Fracasos Del Che Guevara" de la edición del 31.07. 2005 le agradecería se recogiese esta réplica, mostrando otro lado de la personalidad de ese personaje tan controvertido, apenas como un acto de justicia y libertad de expresión, característica de ese medio de información.      

Lo Saludo agradeciendo su atención.     

Eduardo Oscar Di Nunzio

email: eodinunzio@terra.com.br 

 

 LOS VALORES DEL CHE GUEVARA 

Señor Redactor, permítame informarlo que soy un argentino de 80 años de los cuales llevo 50 residiendo en Brasil, lector constante via Internet de "La Nación" por lo que acompaño las  noticias de mi patria, de la cual nunca renegué mismo amando esta tierra que me abriga, así como Ché Guevara no renegó  como afirma el autor del artículo publicado en 31 de Julio pasado, con el título: '' LOS FRACASOS DEL CHE GUEVARA'' cuyo nombre no menciono.  Haré crítica sobre los conceptos emitidos y no sobre la persona a la que le concedo el derecho de libre expresión, derecho que espero también me concedan.

 

Sobre renegar de su patria me permita también que transcriba una  declaración pública de Che Guevara;  " Yo nací en la Argentina ... permítame que sea un poquito pretencioso al decirle que Martí nació en Cuba y Fidel es americano.   Yo nací en Argentina, no reniego de mi patria de ninguna manera, tengo el sustrato cultural de la Argentina, me siento también tan cubano como el que más y soy capaz de sentir en mí los sufrimientos de cualquier pueblo de América fundamentalmente, pero además de cualquier pueblo del mundo"

 

Por lo que se deduce que el autor está mal informado. También erra al afirmar que abandonó  a su amigo Granado en un leprosario  de Venezuela en 1952.  En ese año  ambos realizaron un viaje de motocicleta con destino a Venezuela, lo que es del conocimiento público.  Habían decidido dedicar sus competencias profesionales, como Bioquímico Granados, yá recibido y como médico Guevara faltando un año para tal.

 

Realmente en 1953, ya recibido como médico, salió de Buenos Aires para juntarse a Granado.  Pasando por La Paz, donde me encontraba exilado con otros argentinos, yo por cuestiones sindicales. 

 

En esa ocasión nos encontró y nos confesó que inspirados en el científico alemán Albert Schweitzer, eximio organista, que con el resultado de sus conciertos sustentaba un leprosario en un Pais Africano, lo que le valió el premio Nobel de La Paz en 1952, estaba a camino de Venezuela donde ya se encontraba esperándolo su amigo Granado.

 

Se confesó simpatizante de Perón, y extrañó que pasando la Argentina por un período económico y social privilegiado debido a sus recursos, sobretodo en alimentos que a Europa destruida por la 2da. guerra  mundial tanto precisaba,  podían cambiar Bolivia país pobre por la Argentina.   Esta referencia sirve para mostrar que en ese momento no profesaba su fé marxista, que asumió después, asunto que no es motivo de tratar en esta réplica.

 

Lo que mas le interesó en nosotros fue el tema apasionado que estábamos tratando como asunto del momento.

 

Le contamos sobre nuestra indignación por los preparativos que el General Castillo Armas, ex Ministro de Guerra de Guatemala, estaba realizando en Honduras financiado por la "United Fruit", para dar un golpe de estado contra el Presidente legítimamente electo por los guatemaltecos del Presidente Jacobo Arbenz, por el partido Socialista, y que contrariaba los intereses de aquella compañía norteamericana.

 

No abandonó a su amigo Granado, por el contrario, una de las primeras iniciativas, cuando triunfó la Revolución Cubana fue convidarlo a trabajar en Cuba, donde se encuentra hasta hoy.

 

Así, Guevara se juntó a nuestra indignación e nos confesó que pasaría por Venezuela para comunicarle su decisión de colocarse a disposición de las huestes de Jacobo Arbenz,  lo que hizo poço tiempo antes de Castillo Armas consumar sus objetivos teniendo Guevara que refugiarse en la Embajada Mexicana.

 

Imaginamos que por este episodio su vocación humanista se volcó para la política,  siendo del conocimiento público que fué  a dar  en México con el grupo revolucionario cubano liderado por  Fidel Castro, quien lo aceptó como médico de la expedición y es en ese momento que gana el apodo " Che ".

 

El autor del artículo  lo cuestiona también como "vanidoso",  por haber publicado

 "Guerra de Guerrillas ".  En ese caso también él es vanidoso por publicar "Mancha venenosa" -  parece que " veneno " está muy presente en su existencia-.  Confieso que yo también debo ser vanidoso,  por estar juntando los capítulos de mi próxima publicación con título " El discurso del finado ".

 

Continua afirmando el autor  que Guevara no tubo ningún éxito en la Conferencia de Punta del Este.  También ahí erra.   Fué el representante mas relevante. El único a recibir la mayor distinción  de un País por su actuación en ella, concedida por el Presidente Janio Quadros del Brasil a una personalidad extranjera.

 

Otra afirmación de esta vez hilarante es compararlo con Hitler,  tan luego él que se volcó para el marxismo, exactamente antípoda del fascismo.

 

Por falta de tema se extiende el autor en disgresiones sobre normas arquitectónicas de la ciudad de Nueva York.

 

Muestro mi desagrado especialmente como Argentino.  Me siento herido como hijo de una tierra históricamente solidaria.  Salvo en el episodio de la triple alianza donde los gauchos eran cazados para componer nuestra parte del ejército aliado, pero así que podían desertaban.

 

Argentina nunca invadió ningun País. Fué invadida no una vez, varias veces.  Nunca traicionó un País hermano, por el contrario fue traicionada.  Fue un general Argentino que cruzó la cordillera de los Andes, enfermo encima de una mula para luchar por la independencia de países hermanos.  Tiene la Argentina en su haber dos premios Nobel de la Paz.

 

Cuando las abuelas de Plaza de Mayo iniciaron su movimiento clamando por sus hijos y nietos, la insensibilidad sectaria del régimen en ese momento las proyectó al mundo como "las locas de Plaza de Mayo".  Hoy en día como "Las Madres de Plaza de Mayo" representan una Asociación respetada en el mundo entero, estando allí donde el arbitrio y la prepotencia del poder se hace presente.

 

Hoy, la edad me enseñó, no a concordar,  pero admitir la pluralidad de ideas, de intereses, de ambiciones.  Lo que no puedo concordar es con el sectarismo, venga del lado que venga.

 

Admito sí, que la historia nos muestra personajes que vinieron  con el ideal de servir. Estaríamos en la edad de la piedra si no hubiera existido Jesús, no el Dios y sí el rebelde, contra un sistema que condenaba.  Un Mathama Gandi, un Luther King y porqué nó incluir un Ché Guevara que también como aquellos se inmoló por un ideal humanista.

 

¿Es difícil imaginar el sacrificio que significa luchar en una selva pre-cordillerana, con el frío polar durante la noche y el calor infernal durante el dia?, ¿con el hambre, con la malaria, el paludismo?  Durmiendo despierto en el suelo, esperando una serpiente pasar por encima y picarlo si él se mueve asustado?, balas ricocheteando alrededor  de él?

 

Al final, ¿que se llevó El Ché de este mundo?  Habiendo inclusive participado del poder, al que renunció por su ideal transformador.  ¡ NADA !   

¿ Que dejó ?       Mucho, incluyendo  ¡ su propia VIDA !

 

Por esto millones de personas en el mundo entero lo admiran.  Los que no consiguen admirarlo, por lo menos que lo respeten.

 

                                         Eduardo Oscar Di Nunzio 

e-mail; eodinunzio@terra.com.br 

El autor fué fundador y Presidente da la Cámara-Argentina-Brasileira de Comercio y de la Asociación Cultural Argentina-Brasileira – Casa "Martin Fierro" en Bahía, Brasil. Es un empresario de medio porte.


Primer Museo Suramericano de Buenos Aires,
"Comandante Ernesto Che Guevara"


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