Enviado el: jueves, 04 de octubre de 2018 02:45 p.m.
Para: Rodolfo Baez; Cayetano Quattrocchi
Invitación para lanzamiento en Asunción
Para: Rodolfo Baez; Cayetano Quattrocchi
Invitación para lanzamiento en Asunción
Estimado Dr. Baez: En el adjunto va la invitación que ya estamos poniendo en circulación por la redes sociales anunciando la presentación de su libro.
Lo esperamos!
Un gran abrazo
Cayetano quattrocchi
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El antropólogo cubano que "nos
devolvió EL CUERPO (del Che) AL ALMA (mundial)
6 de Julio de
2004. - Auditorio de la Universidad Nacional de Quilmes,
provincia de Buenos Aires, República Argentina. 7.30 p.m.
Durante dos intensas horas, a
un ritmo verbal infernal y extrañamente comprensible a pesar de la temática
técnica, un antropólogo, un cubano, pero básicamente un hombre
excepcional hace añicos los preconceptos de quienes esperábamos una
exposición profesional, ascética, fría, plena de preciosismos académicos.
Guiados magistralmente por su
pedagogía apasionada, recorremos tramo a tramo los vericuetos geográficos,
psicológicos, sociales y políticos, que debieron enfrentar este grupo de
cubanos que durante dos años porfió, hasta lograr que la madre tierra
devolviera a la humanidad los restos del San Martín del Siglo XX y sus
compañeros de hazaña. ( Ernesto Che Guevara y su guerrilla.)
Una pantalla gigante en la que con
computadora se proyectaron fotografías, nos graficó la técnica, habilidad,
pasión, esfuerzo y fé del grupo cubano.
De la electrizada atención,
pasábamos a la carcajada en virtud al histrionismo, desenvoltura, sinceridad y
pasión aplicados en su alocución.
La huída desesperada montaña abajo
de los dos antropólogos cubanos, supuestamente perseguidos por un tigre, pero realmente arañados y golpeados por matorrales y piedras
fué una película aparte.
La desaparición nocturna de
las estacas de demarcación que los investigadores demoraban todo un
día en clavar con precisión, atribuída primero a algún agente de la
CIA que noche a noche se esmeraba en estropearles la búsqueda, devino
en sorprender "in fraganti" a la anciana boliviana que para calentar
su covacha las robaba.
Las lágrimas no faltaron cuando la
imagen del primer resto óseo y la humanidad que expresaban los tonos del
antropólogo González se fundieron en un solo sentimiento.
La emoción nos embargó a todos al
comprender que los dos estudiosos cubanos fueron capaces al
encontrar los restos, de detenerse e invitar a sus colegas argentinos a
que regresaran a Bolivia para compartir el honor del hallazgo.
El cerrado aplauso habló del agradecimiento argentino a ese gesto solidario e
internacionalista.
Hace ya años los antropólogos
cubanos exhumaron un entierro de valientes.
Hoy el doctor Jorge González con su
conocimiento, bonhomía, franqueza, experiencia y claridad, exhumó ante el
auditorio la perfecta muestra de como se hace pedagogía didáctica, sin
acartonamientos y rebuscados preciosismos.
La República Argentina, su provincia
Buenos Aires, la ciudad de Bernal, la Universidad Nacional de Quilmes, los
profesores, peritos, estudiantes y neófitos como yo tuvieron
un disertante americano de lujo.
Eladio González (Toto) Chaubloqueo.
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