mala información es accidente mortal evitable cuidate de Clarín: arq. Rodolfo Livingston el Hacedor de Chaubloqueo y el primer museo suramericano Ernesto Che Guevara Amar es Urgente Miguel Abuelo de la Nada Chaubloqueo Eladio González toto

miércoles, 21 de octubre de 2020

arq. Rodolfo Livingston el Hacedor de Chaubloqueo y el primer museo suramericano Ernesto Che Guevara Amar es Urgente Miguel Abuelo de la Nada Chaubloqueo Eladio González toto

una carta de mis amigos, Irene y Toto:

 “SE ACERCAN TIEMPOS DIFÍCILES” ,   “AMAR  ES  URGENTE “   Miguel Abuelo (del grupo de rock “Los Abuelos de la Nada”)
.(de tu libro Rodolfo)

Mar del Plata, 17 de Marzo de 2005.

Señor Arquitecto de espíritus Rodolfo Livingston:

Mi querido amigo: esto que sigue es como un mail “oxidado”, una comunicación fuera de época.   Es una declaración multipropósito que apunta a honrar a quien honor merece, “vos”.  En lo que nos toca a Irene y a mí, representás al “Mago” que nos posibilitó el tener y disfrutar de miles de hijos, y muchos amigos también.

El día que mi mujer y yo escribamos la historia de la Escuela de Solidaridad “Chaubloqueo” un capítulo completo y a más del prólogo al epílogo, multitud de hechos tendrán indeleble tu generosa y desinteresada impronta.

Fuiste la “llave” que posibilitó se abriera el olvidado portón de la Solidaridad apolítica con Cuba y la tenaz, inteligente, apasionada e incansable Irene, maniobró posibilitando que en siete años de denodada labor, el Pueblo Cubano bloqueado recibiera entre “todas” sus provincias, la increíble (antes) solidaridad argentina, traducida en doscientas cincuenta toneladas de medicinas, mercadería, alimentos, vestimenta, material didáctico y lo más importante: el calor y amor que significaron las decenas de miles de cartas que cumplieron magnificado ése intento de donar sangre al Héroe cubano, policía cuyo nombre enarbolan varias escuelas en diferentes provincias. 

Fuiste y sos el común denominador de cubanos y argentinos.  Te veo como a un “Atlas” del siglo XXI soportando al mundo para tratar de que no se autodañe. 

¿Porqué 29 años tuvieron que pasar, para que el país nativo del Comandante Ernesto Che Guevara tuviera un Museo a su memoria? 

¿Porqué se rompió la inoperante y estúpida hegemonía del Partido Comunista ó la Casa de la Amistad Argentino Cubana, que solo permitían utilizar una ínfima fracción de la verdadera capacidad de ayudar del pueblo argentino progresista?. 

Se hizo muchísimo y vos sabías que se hubiera podido hacer mucho, asombrosamente mucho más.  Lo intentaste después de presentarme en la Casa de la Amistad, quisiste que Aliberti y Horvath me dieran cabida en su programa, pero ya el largo brazo del Comunismo argentino en “alerta roja” comenzó a cerrar puertas. 

Ni su diario “Propuesta” (limitada) ni sus programas de radio, ni sus organizaciones adocenadoras aceptaron éste “ornitorrinco” (soy buen alumno, ¿verdad?) que les sacaste de tu galera y que se llamó ¡Chaubloqueo!.  

Ninguno de los capitostes de los partidos ni Socialista, ni Comunista, ni Peronista, ni Radical, ni Aliberti, ni Horvath, ni Fanny Edelman, ni tantos otros tuvieron tiempo “ni ganas” de presenciar en aquel histórico 19 de Octubre de 1996, la inauguración del Primer Museo Suramericano dedicado al Che Guevara.  

Ni ése día ni los restantes días de los seis años en que funcionó, se dignaron estas gentes a conocerlo (era entrada gratis).  

Tampoco te resultó esa generosa idea que le tiraste a Cascioli intentando que “Humor” fuera difusora de la experiencia de “Chaubloqueo”.  

Te extenuaste ofreciéndonos y nunca perdiste el ímpetu.   Sos padrino del museo, y de los tres padrinos (General Harry Villegas Pombo, doctor Alberto Granado Giménez y Arq. Rodolfo Livingston) sos el que más trabajó para su éxito.

En una caja que guardo rotulada como “imprescindible” han quedado las risas, los aplausos, los silencios, la música, las voces de los cientos de personas que festejaron tu cumpleaños en el Museo del Che Guevara de la calle Nicasio Oroño 458, barrio de Caballito, Capital.  

Ahh, …. También metí en ella nuestra tristeza por no haber podido acompañarte ése gran día.    Estábamos, yo de enfermero e Irene llevaba dos meses y medio en cama y se dejaba (¡por fin!) atender.

¿Cuánto te debe Cuba?
¿Cuánto la Argentina?
¿Cuánto te debemos nosotros dos?

Algo impagable, tanto como la Deuda Externa.  Hoy vuelven a llegarnos tus generosos libros.  ¡Qué útiles serán a miles y miles de argentinitos!.  

Vos deberías saber que Irene y yo hemos hecho un deber en nuestras existencias de transformarnos en una especie de Testigos “no del pobre Jehová”, que por eso tiene mala prensa, sino de “San Rodolfo Arquitecto” que dicen los rankings clericales, que se ha puesto por arriba de San Expedito, empatándole en las 9 Avemarías pero derrotándolo con esa Nidia única y milagrosa.

Por eso siempre en la cartera de Irene ó en el bolsillo de Toto, viajan los magníficos abrementes, abrecorazones y abrebocas (para que escapen las carcajadas) que son tus libros, esos Rodolfos de tinta y papel que tanto bien hacen a la humanidad y los vamos sembrando, esperanzadísimos en provincias y manos argentinas y en almas de países extranjeros. 

“RODOLFO LIVINGSTON EXISTE, ES IMPRESCINDIBLE Y NO ESTA EN COMA, Y NOSOTROS LO QUEREMOS”  
  
                                  Irene y Toto    -   Chaubloqueo  -  Museo Ernesto Che Guevara 